LOS INVITO A QUE SIGAN ESTE VIAJE CON SU IMAGINACION, TRATEN DE SENTIR LAS SENSACIONES, LOS LUGARES, LOS SABORES, DEJEN QUE SU MENTE LOS TRANSPORTE POR LOS UNIVERSOS DE SU IMAGINACIÓN, Y DESPUES CUENTENME QUE LES PARECE...Estamos en invierno. Sentimos la escarcha en nuestra nariz, cuando bajamos del colectivo, que aunque todo el ambiente era desagradable, por lo menos, mientras estabamos apretados a miles de personas (me fui a la mierda con el "Miles"), no pasabamos frio. Pero tenemos que bajar del colectivo en algun momento. Vemos a toda la gente acurrucada en sus bufandas, algunas con barbijos, y nosotros tambien, apenas podemos abrir los ojos, por el frío y por el viento. Pasas por un monton de negocios, negocios todo por 2 pesos (que igual, lo mas barato sale 5), farmacias, perfumerias, algun que otro kiosko, zapaterias, negocios de ropa, shopping... pero te hartaste de los shoppings! Queres estar calentito, ¿Asi que... que podrías hacer? En eso, mientras seguis caminando y ya, delirando, en que los musculos de tus piernas podrían llegar a congelarse, y te inmovilizarías, sin poder caminar... Ves una cafetería, ¡Si! Que tiene fotos pegadas de hermosos cafés humeantes, con crema arriba, y algo rallado, que podría llegar a ser chocolates, y ves tostaditos con el queso que se le derrite a los costados, y por la foto, parecen que estan bien calientes. Ves porciones de torta, y se despierta el gordo que tenes adentro. Y entrás. Si, entrás. Decidis darte un gustito de vez en cuando, incluso aunque estes solo. A nadie le viene mal, tomarse un tecito solo de vez en cuando. Y Pensar en la vida, en la facultad (o en el colegio), en que hacer al otro dia, como disfrutar mejor las vacaciones, en cómo va a seguir LOST, en los amores, en que te estas quedando sin bateria en el celular, y aun te queda un largo viaje hasta tu casa. PERO NO PIENSES EN ESO AHORA, porque estas entrando a la cafeteria. Ya es de noche, el sol desaparecio, pero apenas son las siete de la tarde, si, de la tarde. Entrás, y ya al entrar, oles un aroma que te cambia el ánimo, instantaneamente. Ves a las o los camareros o camareras (es tedioso hablar asi..), con sus trajes negros, y sombreritos, llevando bandejas con cantidades de cosas deliciosas, ves que una lleva un submarino gigante, con dos tabletas de chocolate, una bandeja repleta de medialunas de manteca rebosando de pegajosas, otra bandeja lleva dos capuchinos, con tostadas y cuatro pocillos con quesos, y dulces. Mirás a tu alrededor, un montón de gente, despojada de sus abrigos, tomando cafés, riendo con sus amigos, familias, hijos, o parejas. Decidis sentarte, pero esta todo lleno. Aunque, ahi a lo lejos, ves una mesa, una mesa para uno. En realidad, te sentás ahi, pero una silla queda vacía, pones tu mochila, o cartera, y tus camperas ahí. Te sentás y mirás por la ventana, gente que baja del colectivo, acurrucada en sus bufandas, casi corriendo porque el frio y el viento les amenaza con quitarles la vida (faa!). Pero ahora sonreís, porque sentis el calorcito de la calefacción. Te pones a pensar, que en realidad el mejor invento del hombre no es la computadora, si no, la calefaccion! Te pones a pensar que eso mismo pensaste del aire, en el verano pasado cuando te acostaste casi desnudo en tu cama, con el aire al máximo y esperando recuperar el oxígeno que el sol, y el calor, te habían quitado. Deseas estar ahi ahora, solo porque hace frío. Sacas tu celular, pero nadie te mando un mensaje. Lo dejas en la mesa, después te acordas de tu vieja, o tu tía, o abuela, que te cuentan que una vez vieron que a una chica le robaron el celular porque lo dejo en la mesa, crees que son perseguidas, pero igualmente lo guardas, porque si llega a ser así, vas a tener que escucharlas diciendo "Te lo dije, te lo dije!" seguido de un "Estos jovenes despreocupados, ¡Por eso pasan los accidentes!" Y se convierte todo en una conversación donde discuten con los abuelos, los tíos, y cualquier persona que supere tu edad, diciendo que cuando eran jovenes se podía vivir tranquilo. La realidad, es que la realidad en el pasado, siempre fue mejor. Pensas que dentro de diez años, las cosas van a estar peores, y vas a desear estar en esta epoca. Pensas que fue un poco fatalista lo que acabas de decir. No sabes porque, quizás porque tu mente no puede ser liberada, pero te pones a pensar que la semana que viene tenes los parciales de la facultad, o tenes que rendir las materias del secundario. Por un momento te deprimis, pero en ese momento llega el.
-¿Hola, que te puedo servir?-
Siii, al fin. Pensas dentro tuyo, claro, estoy en una cafeteria, vine a tomar algo. Pero todavia no vi la carta. ¿Que mirás tanto? ¡No se todavía! Pero si te digo que vengas despues, no vas a venir, vas a desaparecer, o te voy a ver cagandote de risa con alguien de la barra, de espalas a las mesas, y no voy a querer pararme a tocarle el hombro como un imbecil, para que me vengas a entender. Entonces, sonas tarado, pero improvisas algo.
-Eh... Si... Tengo que ver todavía-
-Bueno, vuelvo despues- ¡No! ¡No lo hagas! No tenes uqe dejarlo ir, sabes como sigue todo esto... ¡No! Tarde, se fue. Lo peor de todo, es que abris la carta para ver que te podes tomar, pero antes de eso, sacas la billetera. Te quedan diez pesos. ¿Diez? Ah si, te compraste esa revista estupida en el puesto del subte. Si tendrías los veinte pesos, podrías al menos comerte una medialuna. ¡Que caro esta todo! Ves los precios, y te podrías tomar un café, un capuchino, un submarino, un cafe con leche, un licuado, ¡De tan solo leerlo te da frío y cerras la carta! No sabes que pedir, nada te conforma. Mirás para tu derecha y hay una pareja de dos señoras que superan los cincuenta, incluso, sesenta años. Y estan tomando un te. Ves que tienen una tetera, y se estan sirviendo el segundo té. Y es muy humeante. No sabes porque. No sos fanatico del té, pero decidis pedirte uno. Mirás para la barra, y paso lo que te temías. ¿Que sucede con esto? ¿Tanto tarda una persona en decidir qué merendar? Levantas la mano, a magolla, porque el esta de espaldas. Entonces pasa una chica por al lado tuyo, y le decís.
-Disculpa-
-¿Si?- Te dice ella con su cara y sonrisa simpática.
-¿Me podes atender?- Crees que como tiene esa cara tan simpaticona, te va a atender.
-Disculpa, pero yo no atiendo estas mesas. Ahora te lo mando al chico- Sonríe de nuevo, entonces te quedas tranquilo, porque seguramente ella va a la barra y le avisa. Claro, ahi esta. Justo al lado de el, dale, tocale el brazo y avisale, que esta charlando con el de la caja. No creo que sea muy importante. ¿Que haces? ¡QUE HACES! Se fue a otro lado. La odias por un minuto. Despues pensas que ya estas como tu viejo, que siempre lo criticas. Quejandose de todas las atenciones de todos los cafés y/o restaurantes. Se da vuelta el, por si solo. ¡Si! Levantas la mano, pero no te ve, y se vuelva a dar la vuelta. ¡Dios! Volvés a mirar tu celular, la hora comenzó a avanzar, tampoco querés llegar muy tarde a tu casa, porque tu mama va a empezar a preguntarte donde estabas, porque tardaste tanto, la tuviste que haber llamado, porque estuvo preocupada. Se da vuelta de nuevo, ¡Es tu oportunidad! Levantas la mano, pero tamben lo hace la vieja que esta adelante tuyo, parce que solo vio a ella, pero se acerca.
-Disculpa- Le decís. -¿Te hago el pedido?-
-Si, ya vengo- Te dice. Vuelve a la barra, a pedir la cuenta de la señora que esta frente tuyo. La mirás. ¿Por que tantas joyas? Vuelve, despues de unos segundos. Le da la cuenta, le pagan, y le decís de nuevo.
-¿Te hago el pedido?- Pero te vuelve a decir que lo esperes, y va a la barra, le da el vuelto a la señora, y por fin, viene con vos.
-Si, disculpa, ¿Que te traigo?-
-Un té-
-¿De qué?- La puta madre. ¿Hay variedades? -Tenemos tés especiales, de la marca Fuang Chin Suàn, son importados, si querés te traigo la caja y elegís- Despues de todo estas para darte un gusto, asi que asentis y el vuelve a irse para la barra. Mirás afuera, esta mas oscuro, no pensabas que podía estar más oscuro. Pero está mas oscuro. Un minuto. Dos. Tres. Cinco minutos, y el muchacho nunca volvió. Volvés a mirar para la barra, pero el ya no está. ¿Que pasó? Otros cinco minutos pasan. Te acercas a la barra.
-¿Disculpa? Un mesero, medio gordito, morochito, que me estaba atendiendo a mi.-
-Se fue-
-¿Como se fue?-
-Si el unico mesero, termino su turno. ¿Donde estas sentado vos?- Te pregunta el de la caja.
-Allá- Le señalás.
-Ahora te mando una chica-
-Gracias- Sonreís falsamente, como tan bien te sale. Y volvés a sentarte. Entre pito y flauta, se te fueron veinte minutos sentado ahí. Empezas a sentir calor, y te sacas el ultimo buzo. Quedas en remera. Por fin viene una chica.
-Te dejo la carta-
-No, no, ya sé que pedir- Le decis antes de que ella huya, sin ganas de trabajar. -Un té Fua Chi Chuan Kun, o algo así-
-Ah, los té Fuang Chin Suàn-
-Si, esos-
-No nos quedan más, disculpame. Tenemos té comun, te de limón, y té de manzanilla-
Terminas pidiendote un té comun, y por fin llega, con sus teterita, y su saquito en la taza. Te lo servís, todo y lo ves ahí. Humeando. Diciendote "Bebeme. Bebeme, y recorreré tu cuerpo con mi calor. Dejaras de ser victima del invierno". Te regocijas oliendolo, y sintiendo como calienta tu naríz. Pones tus manos alrededor de la taza. Es indescriptible el placer que te sentís. Lo tomás. Sin azucar, como los orientales. Y por fin, llego tu momento de relajación, y de meditación.
Porque eso es un té. En todos aquellos que tenemos el valor de tomar un té. Y que nos llamen abuelos. En todos aquellos que en vez de un café, preferimos un té. Que, incluso, llamennos anti-patria, si quieren. Que, incluso, preferimos un té antes que un matecito. Nosotros, tenemos la cualidad de poder relajarnos y meditar con este invento oriental. Porque el té es mas que un té. Es más que agua bien caliente, con un sobrecito. Es placer. Es paz. Es relajación. Es olvidarnos del mundo entero. Así que, basado en mi experiencia personal, voy a dejarles algunos tips utiles.
DÍAS PARA TOMAR UN TÉ, Y QUE TIPO DE TE, Y QUE LA PASES BIEN.-Te fuiste a final en una materia, dos, o tres. O Bien, desaprobaste alguna, y debes recursarla... Tomate un té rojo, que incluso ayuda a adelgazar. Ya que te vas a deprimir, incluso si lo hacías, dejaras la dieta. Y comenzarás a comer lo que se te cruce...
-Cortaste con tu novio/a, que estabas hace 3 años. Tomate un te de limón con boldo. Asi te relajas, y llenas tu organismo del limón con su hermoso olor cítrico, y su caracteristico gusto. A PREFERENCIA PERSONAL: SE RECOMIENDA SUMERGIR Y DEJAR SUMERGIDA, UNA RODAJITA DE LIMÓN. SI NO TE GUSTA EL LIMÓN, PUEDE SER TÉ DE NARANJA.
-Pasaron Harry Potter 6 para una semana más. Tomate un té de boldo, manzanilla, y valeriana. Relajate, todo va a mejorar.
-Tenes que ir a la facultad, pero tenes media hora todavia para desayunar. Tomate un tecito común, y si estas de humor, sumergile una rodajita de limón, o naranja. RECOMENDACIÓN: ACOMPAÑAR CON TOSTADITA CON QUESO, Y DULCE DE LECHE, O MERMELADA SI ESTAS EN REGIMEN.
-Es tu cumpleaños, y tu mama te quiere hacer el desayuno. Pedile un tecito de manzana, siempre bueno para los dias especiales.
-Te duele la panza, porque comiste como un cerdo con el asado que hizo tu viejo. Tomato un tecito digestivo, de verdad funcionan!
Pero la verdad es esa. Y lo descubris cuando ves que tu taza esta vacía. ¿Ya te lo tomaste todo? Abris la tetera, y esta seca. ¿Ya te lo tomaste todo? Volves a preguntarte. Y te das cuenta en todas las cosas que pensaste, todas las que se te pasaron por la cabeza, a todas las conclusiones a las que llegaste. Renovado. Te pones de pie contento, te calzas todos los abrigos, la mochila, o la cartera, y te dirigis a salir. Pero tanta ralajacion y meditación hizo que te olvides de lo mas importante...
-Disculpa, No pagaste- Te grita la mesera simpaticona.
¿Nunca tomaste un té? ¿Sos matero? Probá algun dia esta experiencia. Andate a un café solo, a tomar un té (que ironía...) Y fijate, si la meditación no llega a vos por sí sola.
